Análisis Game Cube PlayStation 2 XBox

Baldur’s Gate: Dark Alliance / Análisis (PS2, XBOX, GameCube – 2001)

Tras las exitosas primeras entregas de Baldur’s Gate en PC, en el año 2001 llegaba a nuestras manos Baldur’s Gate: Dark Alliance, la primera incursión de la saga y del mundo de los Reinos Olvidados en consolas de la mano de Snowblind Studios. Aunque hemos hecho el análisis tras haber jugado a la versión de PlayStation2, el juego salió también para XBox y GameCube, siendo todas las versiones idénticas salvo por pequeños detalles gráficos.

Podría dedicar muchos párrafos del análisis a explicar de qué va Baldur’s Gate: Dark Alliance, pero lo dejaré en que se nos presenta la típica historia de fantasía llena de monstruos, conspiraciones, conflictos entre las razas que pueblan la tierra, magias y demás elementos a modo de excusa para hacernos avanzar dando ostias al más puro estilo Hack & Slash mientras ganamos experiencia para mejorar los atributos de nuestro personaje y adquirimos mejores armas y equipo. Sí, es el primer juego que hace uso de la tercera edición de las reglas Advanced Dungeons & Dragons, basadas en el juego de mesa, pero podríamos decir que toda la diversión del juego se traduce en ir a la tienda 24 horas más cercana con un colega, pillar unas bolsas de patatas fritas, una botella de coca cola y encender la consola para disfrutar de una experiencia más que digna para dos jugadores.

Podrás pasarte el juego a solas, pero la verdadera diversión está en hacerlo con un colega o con tu novia o si no te va eso de socializar, pues mal será que no encuentres a alguien por internet, aunque te recomiendo que salgas un rato y te busques a un amigo. Me he terminado el juego con el redactor y también amigo Vainas, mis 2 ex novias y también con mi novia actual hace un par de días… y todo por jugar de una puta vez a la segunda parte, que a no ser que el juego esté maldito, es algo que haré dentro de un par de semanas.

Taberna de la Elfa Cantora

El recibimiento que nos dan en la taberna de la Elfa Cantora no podría ser mejor.

El número de personajes jugables no es demasiado alto: El guerrero enano, el arquero humano y hechicera elfa. Aunque no podremos distribuir los puntos de habilidad nada más comenzar la partida porque vienen de serie, sí podremos hacerlo cada vez que subamos de nivel, siendo recomendable subir dureza y resistencia al enano porque será el que más leches recibirá y dará, destreza y habilidades de arco al humano y todo lo relacionado con el uso del maná a la hechicera. Aunque todos los personajes tienen habilidades especiales que utilizan maná como por ejemplo los distintos tipos de flecha del arquero o los ataques circulares con hacha del enano, la hechicera es obviamente la que más se va a colocar con este famoso líquido azul… que ya, ya… maná, sí, sí, maná; ejem… supongo que el proyecto hombre de los reinos olvidados debe estar saturado de druidas, magos y nigromantes.

Como no podría ser de otro modo, disponemos de un indicador de vida y de otro de maná, debiendo tener siempre en el inventario un buen número de pociones de cada tipo para no quedar vendidos frente a las hordas de enemigos que nos atacarán, teniendo también pociones de retirada para poder ir automáticamente al poblado más cercano a vender la chatarra que nos encontremos o comprar material sin tener que hacernos la caminata de vuelta que tanto jode pero que realizaríamos igualmente de no tener dichas pociones porque la codicia es la codicia.

Baldur's Gate: Dark Alliance, ratas

Como es ya ley de vida en el género, en la primera misión deberemos limpiar la bodega antes de que vengan los de sanidad y vean semejantes ratas.

Veremos todo desde una perspectiva isométrica en 3D, manejando a nuestro personaje con el stick izquierdo del mando, seleccionando armas y habilidades con la cruceta y utilizando un botón para atacar, otro para saltar, otro para cubrirnos y otro para hacer uso la habilidad especial seleccionada. Decir que también podemos mover la cámara en 360 grados y como también es habitual, superponer el mapa en 2 niveles de zoom sobre el escenario. El juego se divide en tres actos bastante lineales, siendo los dos primeros bastante buenos pero pasándole al tercero lo mismo que al tercer acto de Half-Life, que nunca debió existir o por lo menos debió haber sido planteado de otro modo.

El primer acto se desarrolla en la ciudad de Puerta de Baldur y existen varios personajes con los que hablar, que serán los que nos den tanto las misiones primarias como las secundarias. Por desgracia, las misiones secundarias desaparecen en los demás actos y los personajes con los que hablar se reducen considerablemente, no estando mal del todo porque no nos torturarán con sus historias pero estando a la vez mal por la pérdida de calidad que parece sufrir el juego a medida que avanzamos. Al menos, siempre tendremos al típico tendero estafador al que le compras un arma por 100.000 monedas de oro pero que luego no te da ni 9.000 por ella cuando se la vuelves a vender aún siendo éste el que habitualmente te encarga las misiones, plenamente consciente de que ayudas tanto él como a su gente desinteresadamente.

Hachas, martillos, espadas de una y dos manos, bastones, escudos, botas, cascos, guantes, anillos con poderes y muchos más objetos serán con los que podremos equipar a nuestro personaje, pudiendo estar a su vez mejorados con los típicos conjuros de electricidad, fuego y hielo para ganar en poder y efectos especiales.

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Admitámoslo, es lo primero que hacemos nada más acceder al inventario de cualquier personaje femenino.

Visualmente el juego es una delicida, destacando el selector de 50 y 60 Hz, estando el juego perfectamente adaptado para ambas versiones, viniendo además doblado al castellano. El modelado de los personajes y entorno parece adelantado a su época, pues los juegos de PS2 de entonces eran bastante cutres gráficamente. Ni al final de la época de PlayStation 2 era habitual ver juegos con estos gráficos, pareciendo más un juego del año 2004 o 2005 que del 2001. Tanto los efectos de iluminación como los de luces y sombra o las animaciones de los personaje son espectaculares, sobre todo teniendo en cuenta que el 3D aún no se había logrado imponer como dominante dentro del género en la fecha de publicación, estando plagados de clipping y demás fallos gráficos la mayor parte de juegos que lo habían intentado antes, debiendo esperar un añito más para elevar la calidad del 3D en este tipo de juegos, concretamente a Dungeon Siegue, aunque conste que los gráfios de Vampire: The Masquerade – Redemption lucían ya muy bien en el año 2.000 .

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Pegándole un poco a Karne, el primer jefe al que nos enfrentaremos. Recomiendo quitar el mapa durante algunas batallas para enterarnos mejor de lo que pasa en pantalla.

Los efectos de sonidos son también bastante buenos así como el doblaje al castellano, salvo por el habitual problema de sincronización labial. Tenemos muchos enemigos y muy variados, pudiendo apreciar incluso detalles como los huesos de los esqueletos que es esparcen por el suelo al ser aniquilados. Lejos de repetirlos, el juego nos presenta más y más tipos de enemigos para mantener la alegría del colectivo friki en el transcurso de nuestra aventura, aunque sin embargo los jefes finales están a la altura del conjunto, siendo todos ellos bastante sosos. Además existen una serie de mocos verdes y cubos de agua azules que no pegan para nada con el resto del conjunto

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Algunos enemigos son tan feos que cuando los matamos no son conscientes de que les estamos haciendo un favor.

En resumen, el juego no nos presenta nada que no hayamos visto antes ni destaca o es sobresaliente en ningún aspecto salvo por la inclusión de Sleivas, el personaje con más superfluas líneas de diálogo que  jamás se haya creado para un videojuego, pero sí se lleva un notable en muchos otros aspectos. Con un poco más de originalidad y de haberse mantenido la calidad en todos sus actos, hubiésemos tenido un mejor producto, pero dado que se nota que aún le faltaban algunos elementos por pulir, dejaremos su nota en un casi notable… no, venga… le damos un 7, pero que no salga de aquí.

Baldur's Gate: Dark Alliance [2001]
7
Notable
Analizado por

EduZRO

Ingeniero informático y también jugador de PC de la vieja escuela. Odiaba las consolas, pero un día se compró una PSP y actualmente tiene 2 consolas más, aunque no ha tardado en volver a sus orígenes. Con hábitos nocturnos, le encantan las nuevas tecnologías e iniciar nuevos proyectos.

6 Comments

  1. Noemn dice:

    A mi me gustó mucho, pero es lo que tú dices, llega un momento en el que empieza a aburrir un poco siempre lo mismo, sobre todo en el acto III. De todas formas, te doy mis felicitaciones por haber tenido la paciencia de jugarlo 4 veces con la intención de tener un compañero para la segunda parte. Ahora imagínate que tu actual novia te dice que no quiere jugarlo… sería una putada… Bueno, seguro que no es así y esta vez tienes más suerte 🙂

  2. neeonez dice:

    Es lo que pasa con estos juegos, que todos llegan a resultar repetitivos a no ser que se mantenga una correcta y compensada subida de habilidades y adquisición de mejores objetos. En el tramo final tiran la casa por la ventana, te regalan todo, la pasta ya no importa… etc es decir, el juego está descuidado, por lo que en efecto, se hace aburrido.

    Si mi actual novia se niega, quemo ambos juegos.

  3. vainas dice:

    Sleivas… qué puto lagarto de mierda, puto bicho pesado asqueroso. Me da rabia que el juego no haya tenido éxito, porque Sleivas es un personaje potencialmente MEME y los videojuegos le deberían haber reservado un lugar como PERSONAJE MÁS HORRIBLE Y ODIADO DEL MUNDO.

  4. neeonez dice:

    Ya te digo… creo que los que lo hemos jugado tenemos pesadillas con él. Pues me he tragado a Sleivas 4 veces!! No se, es el tema de la experiencia de juego con la persona con la que juego, aunque sea mala. De todos modos esta última vez no dejé que hablase todo lo que tenía que hablar. Además sobrevive… podría ser un jefe final legendario.

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