Análisis

Clash of Puppets / Análisis

Las marionetas me dan miedo y mucho. Esa piel brillante con esos ojos de plástico de mirada fija han sido protagonistas de varias pesadillas a lo largo de mi infancia. El protagonista de este juego no es una excepción, porque con su bigote parece algo así como el tío de Chucky y es que además, ningún enemigo del juego podrá llegar a acojonarnos tanto como él. Por si fuera poco, cuando te pones a jugar resulta que tiene voz de niño, siendo aún más siniestro si es que es éso posible.

Dejemos al protagonista a un lado para centrarnos en Clash of Puppets, un plataformas que me recuerda a los primeros juegos de la era de los 32 bits cuando las consolas Sega Saturn y PlayStation competían por el mercado mediante sus posibilidades 3D. La transición hacia las tres dimensiones fue sencilla para juegos de peleas o de carreras e incluso para los shooters, pero antes de que Crash Bandicoot y Super Mario 64 y viesen la luz para cambiar las reglas, cada jugador tenía su propia idea acerca del modo en el que un plataformas en tres dimensiones debía ser concebido.

No se si recordáis un juego de plataformas para PlaySation llamado Bug!. Pues bien, Clash of Puppets es una mezcla entre Bug! y cualquier shooter en tercera persona controlado con los dos sticks de un mando, terminando la receta con unos toques de hackn slash. También tenemos que resolver pequeños puzzles, pero son tan sencillos que no sería correcto considerarlos como tal.

La historia de Clash of Puppets

Al comenzar el juego veremos una breve introducción en la que nuestro protagonista, Charlie, llega conduciendo su camioneta a un autocine de esos en los que aparcas, te pides una palomitas y te dedicas a ver una película desde tu coche. Charlie observa detenidamente un cartel en el que puede leer que echan tres películas ambientadas en cada uno de los mundos del juego y acto seguido se echa una siesta. Fin de la historia. Sorprendente… verdad? Puede que no sea el colmo de la originalidad, pero es una excusa… vale, sí, muya mala, para tener algún motivo por el que recorrer los niveles del juego.

Jugando a Clash of Puppets

Si jugamos en PC podemos conectar un mando o usar el teclado, así que no hay nada que descatar. En cuanto a las versiones de Android e iOS, tenemos un stick táctil en la pantalla que nos servirá para mover a nuestro siniestro protagonista. También tenemos otros botones virtuales a la derecha para saltar y realizar ataques cuerpo a cuerpo. Para realizar ataques a distancia, sencillamente tendremos que arrastrar nuestro dedo pulgar derecho en la dirección deseada para marcar la dirección de nuestros proyectiles. En la parte inferior de la pantalla tendremos un botón para seleccionar y colocar varias trampas a las que tendremos acceso y otro botón justo al lado para cambiar de arma

Los vampiros no parecen peligroso, pero una vez nos alcancen sus ataques a distancia será complicado deshacernos de ellos.

Los vampiros no parecen peligrosos, pero una vez nos alcancen sus ataques a distancia será complicado deshacernos de ellos.

Los controles funcionan muy bien, algo que no es nada común en los juegos de este tipo para Android e iOS, aunque también existe una versión para PC que podéis adquirir en Steam. Es posible usar un mando real en PC o en dispositivos móviles conectándolo al teléfono, pero no es en absoluto imprescindible. Quizás el único problema es que los botones de selección de arma y de selección de trampa están demasiado pegados a los bordes de la pantalla, lo que provocará que en ocasiones despleguemos el menú de nuestro terminal. Controlar a Charlie y hacer que salte en la dirección adecuada es muy sencillo, algo imprescindible en un juego de plataformas. La única excepción reside cuando las plataformas son demasiado estrechas, dado que al usar un sistema de control táctil perderemos la referencia espacial de nuestro personaje y no sabremos muy bien hacia dónde estamos saltando, siendo habitual hacerlo hacia el vacío, aunque afortunadamente no perderemos la vida y reapareceremos cerca de donde estábamos.

Tenemos algunos tipos diferentes de puzzle que implican saltar encima de conductos de vapor, encontrar engranajes, mover cajas y accionar palancas, pero no tenemos mucho más.  Lo que sí hay son trampas de varios tipos: pinchos que salen del suelo, barreras móviles de madera, precipicios… etc, aunque no podemos decir que se haga el mejor uso de ellas al muchas ocasiones. A veces nos encontraremos con una serie de pasillos plagados de obstáculos y con varias puertas cerradas, pues bien; tendremos que llegar al final pasando por todos los obstáculos para encontrar un engranaje y luego tendremos que volver al principio del nivel atravesando de nuevo todos los obstáculos para abrir la puerta del inicio que a su vez abrirá una puerta que vuelve a estar al final, volviendo a tener que realizar el recorrido. Ahora imaginad que hay varias puertas, varias palancas y varios engranajes y que tenemos que atravesar el pasillo de obstáculos unas 12 veces… sin duda esta mecánica no es divertida!

Tenemos tres mundos distintos: transilvania, oriente y fantasía. Cada uno de ellos tiene 10 niveles con un jefe final en forma de OVNI alienígena. Cada mundo tiene su propia estética y sus propios enemigos, algo que sienta muy bien al juego. Nos enfrentaremos a soldados, muertos vivientes, caballeros, magos, vampiros… en general el juego es variado en este aspecto, aunque algunos no dejan de ser skins de los enemigos ya vistos en otros mundos, al igual que la algunos de los elementos del escenario. Existen también algunos niveles especiales en los que solamente hay combates y también otros en los que solamente habrá plataformas, aunque la mayoría son una mezcla. Debes desbloquear cada uno de los niveles para poder acceder al siguiente y no existe otro modo de avanzar, así que no estamos hablando del típico juego en el que compras tu progreso.

No tenemos doble salto, pero si dejamos pulsado el botón de salto alcanzaremos más altura.

No tenemos doble salto, pero si dejamos pulsado el botón de salto alcanzaremos más altura.

El juego también tiene otro problema y es que nuestro protagonista se parará en seco durante un corto espacio de tiempo cuando caigamos en una trampa o cuando un enemigo nos alcance. No existen los típicos segundos de invencibilidad durante los cuales nuestro personaje parpadea, por lo que será muy sencillo entrar en un ciclo iterativo en el que recibiremos daño del mismo enemigo o de la misma trampa. Es muy sencillo perder grandes cantidades de vida por cometer pequeños errores. Los niveles no tienen checkpoints ni puntos de respawn, por lo que si nos quedamos sin vida, tendremos que repetir el nivel desde el principio. La única excepción será cuando nos caigamos al vacío, puesto que apareceremos al inicio de la sección de plataformas. Me hubiese gustado que los niveles más largos tuviesen algún tipo de punto de control para no tener que repetirlos.

En cuanto al tema de las armas, tenemos un montón. El arsenal se compone de un bate de béisbol, una espada, una pistola, una escopeta, un lanza cohetes, un lanzador de rayos, un arma láser, otra que lanzará rayos que rebotan en las paredes… etc, así que como vemos, las armas son variadas, aunque algunas no dejan de ser mejoras de las armas que previamente teníamos. Además de armas,. también existen un montón de monedas esparcidas por el escenario que podemos coger para incrementar nuestra puntuación a la hora de terminar cada nivel, pero ésto se trata de un reto puramente personal, ya que en ningún momento se nos exige recoger todas las monedas para avanzar. La única pega de las monedas es que no sirven para nada.

Al desbloquear cada mundo accederemos a un modo supervivencia ambientado en el mundo que hemos completado en el que nos iremos enfrentado a oleadas de enemigos infinitas, siendo nuestro único objetivo el de aguantar el máximo tiempo posible.

Gráficos y sonido

En general, la apariencia del juego es bastante buena y lo mismo podría decirse del sonido, salvo del que emiten algunos enemigos del primer mundo cuando mueren, que puede llegar a desesperar. Los gráficos son muy coloridos y parece que los desarrolladores han puesto empeño en diseñar a nuestros enemigos, aunque en el fondo da la impresión de que son un tanto adorables, salvo Charlie, nuestro protagonista. Los escenarios de cada mundo disponen de skins distintos, pero el resultado final podemos decir que es de variedad artística. Algunas cosas a mejorar podrían ser el hecho de que nuestro personaje es el único que tiene sombra, algo por lo que no se me caen los anillos, pero lo cierto es que en muchos juegos de plataformas tridimensionales son muy útiles a la hora de saber a qué lugar tenemos que saltar o desde dónde debemos hacerlo para coger las monedas que hay repartidas por el escenario.

clash-of-puppets-1

En el modo supervivencia no cesarán de aparecer enemigos de todas las clases. Deberemos hacer un buen uso de nuestras armas y trampas, pero también de algunos elementos del escenario.

Los efectos de sonido no están nada mal y la banda sonora cumple muy bien, con algunos temas calmados y otros más metaleros que sonarán durante los combates. De nuevo, la voz de Charlie es una mezcla entre niño y señor mayor con tos seca que resulta muy siniestra, pero la del resto de enemigos es bastante infantil tratándose de juguetes, que es lo que se supone que son.

El juego no es muy caro y lo que se ofrece no está mal si conseguimos perdonar el pésimo diseño de niveles de algunas secciones de plataformas. El modo historia tiene una duración bastante digna, que junto a los tres mundos y a las diferentes armas y trampas que iremos recolectando conseguirá que no nos arrepintamos de la compra del título.

Clash of Puppets [2013]
6.2
Bueno
Un juego sencillo y sin demasiadas pretensiones con el que podemos pasar un buen rato si jugamos desde nuestro teléfono o tablet, pero en PC tenemos alternativas mucho mejores. Si le dais una oportunidad y lográis superar algunas secciones de plataformas muy repetitivas, encontraréis un juego muy digno, aunque eso sí, no encontraréis nada épico.Analizado por

EduZRO

Ingeniero informático y también jugador de PC de la vieja escuela. Odiaba las consolas, pero un día se compró una PSP y actualmente tiene 2 consolas más, aunque no ha tardado en volver a sus orígenes. Con hábitos nocturnos, le encantan las nuevas tecnologías e iniciar nuevos proyectos.

No Comments

comment No comments yet

You can be first to leave a comment

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

10 + 4 =